jueves, 3 de junio de 2010

Colombia y su dinamismo democrático.

Por: John R. Thomson



La primavera en Colombia ha sido emocionante y accidentada, con seis candidatos a la cabeza de nueve que compiten por la presidencia del país. Los seis son personas inteligentes, comprometidas y representan el espectro de las filosofías políticas. En la primera vuelta electoral de mayo 30 quedaron dos contendores con antecedentes y puntos de vista ampliamente divergentes. La definitiva segunda vuelta será el 20 de junio próximo.

El ex ministro de defensa, Juan Manuel Santos, obtuvo 46,56% y el ex alcalde de Bogotá, Antanas Mockus, obtuvo el 21.5%. Tres veces ministro, el doctor Santos presenta un programa detallado; el doctor Mockus, ex profesor y rector de la Universidad Nacional, hace un llamado al cambio no muy bien definido e inquietantemente parecido al de Obama.

Este observador discutió hace poco una amplia gama de temas con el doctor Santos y se convenció que él ofrece la mejor opción, en especial después de los exitosos ocho años de Álvaro Uribe como presidente, copiosamente aclamado como el mejor líder de la historia colombiana. Consideremos tres dicientes ejemplos:

1) El doctor Santos dirigió la vigorosa campaña de la administración Uribe contra el famoso grupo guerrillero FARC, la mayor amenaza de secuestro y narcotráfico del país desde hace 50 años.

El doctor Mockus, mientras prometía luchar “durisimo” contra las FARC, dijo confusamente en la misma entrevista que esperaba imitar el ejemplo de la pequeña Costa Rica y eliminar las fuerzas militares. Para agravar la situación, dijo en seguida que extraditaría a Álvaro Uribe, que cuenta actualmente con una tasa de aprobación de más del 70%, si el gobierno de Ecuador lo solicitaba, y al día siguiente dijo haberse “confundido” por la pregunta.

2) El doctor Santos ha presentado un programa detallado respecto de asuntos que van desde su fuerte, la seguridad nacional, hasta el desempleo, la educación y la salud.

El doctor Mockus ha evidenciado un débil y cambiante conocimiento de los temas y ha ofrecido escasa información sobre lo que haría como presidente. Fue el único candidato que dijo en un debate presidencial que él no habría dado de baja a Raúl Reyes, el segundo líder de las FARC, que estaba a unos pocos metros dentro de la frontera con Ecuador cuando su campamento fue bombardeado desde el espacio aéreo colombiano, una estrategia montada por el doctor Santos. Cuando posteriormente le preguntaron qué sintió en ocasión del crucial ataque contra las FARC en 2008, Antanas Mockus exclamó: “No me acuerdo”.

3) El candidato del doctor Santos para la vicepresidencia, Angelino Garzón, sirvió con distinción como Ministro de Trabajo y Gobernador del departamento del Valle. Un ex comunista y líder sindical, el señor Garzón tiene un récord intachable equivalente al del doctor Santos, poco frecuente en el deteriorado mundo de la política en Colombia.

El candidato del doctor Mockus, Sergio Fajardo, es un ex alcalde de Medellín con una historia de relacionarse con las fuerzas paramilitares narcotraficantes y de otorgar favores ilegales a los miembros de su familia. Lo más perjudicial son los múltiples reportes de conexiones cercanas con agentes de Chávez.

La experiencia es muy importante. Antanas Mockus ha ejercido dos períodos como alcalde de Bogotá, que se truncaron, pero fueron innovadores. Su programa de cultura cívica aportó un espíritu de orgullo en el torbellino del floreciente crecimiento de la capital. Su colaboración total con la campaña nacional de la administración Uribe contribuyó a un marcado descenso del crimen violento, especialmente el secuestro.

Juan Manuel Santos ha sido jefe de tres de las más importantes carteras ministeriales de Colombia. En 1991, el presidente César Gaviria del Partido Liberal colombiano nombró al doctor Santos como el primer Ministro de Comercio Exterior. Él estructuró el ministerio; construyó fluidas relaciones comerciales con los vecinos Ecuador y Venezuela [las exportaciones a Venezuela fueron de trescientos millones de dólares en 1993 y aumentaron a más de siete mil millones de dólares en 2008]; creó dos grandes motores de crecimiento exportador, BANCOLDEX y Proexport; y negoció la entrada de Colombia a la Organización Mundial de Comercio.

El doctor Santos fue designado Ministro de Hacienda en 2000 por el presidente Andrés Pastrana del Partido Conservador, y devolvió a Colombia la solvencia fiscal después de la crisis de la deuda argentina en 2001. No obstante, su más importante servicio a la nación ha sido como Ministro de Defensa desde julio de 2006 bajo Álvaro Uribe. El doctor Santos no solamente dirigió la lucha extraordinariamente exitosa contra las FARC, también combatió firmemente la corrupción, forzando el retiro de más de 35 generales y oficiales de alto rango.

Antes y en el intermedio de sus cargos de gobierno, Juan Manuel Santos se graduó en el London School of Economics, en el Fletcher School de Derecho y Diplomacia de Tufts University y en el Kennedy School de Gobierno de Harvard. En 1994 creó la Fundación Buen Gobierno para ofrecer entrenamiento administrativo y guía a los funcionarios del Estado.

El doctor Santos me dijo que él “trabajaría para lograr la armonía con el régimen de Chávez. Obviamente quiero reanudar las relaciones comerciales y sería maravilloso reducir la tensión en la frontera. Sin embargo, debe haber respeto mutuo hacia los líderes y la soberanía de los países”.

Parecía referirse, entre otros asuntos de respeto, a la información de inteligencia de que las FARC mantienen 27 campamentos de entrenamiento, hospitalarios y de descanso dentro de Venezuela, con el total conocimiento y apoyo del gobierno venezolano.

Desafortunadamente hay otro asunto, no político: el hecho de que el doctor Mockus sufra de la enfermedad de Parkinson. Dos importantes neurólogos de Bogotá me han dicho que, al observar los debates presidenciales, creen que su enfermedad es avanzada, contrario a los reportes publicados. “Al principio de los debates se ve y suena normal, pero al final de las largas sesiones pierde el control de sus facultades físicas, habla contradictoriamente y se le olvidan las cosas. Esto indica que la condición del doctor Mockus es avanzada”, añadieron y enfatizaron que “el estrés agrava la enfermedad. Esto es potencialmente peligroso para él y para el país”.

Cuando hablamos, el doctor Santos resumió con claridad el tema fundamental: “Es nuestro reto como colombianos completar la búsqueda de la seguridad y simultáneamente construir nuestra economía. Creo que podemos hacerlo y lo haremos”. Se corren muchos riesgos en las elecciones del 20 de junio para Colombia, América Latina y el hemisferio occidental. El voto de los colombianos tendrá gran influencia en el curso de la política y la seguridad en toda la región durante años por venir.

* John R. Thomson es periodista con mucha experiencia y diplomático de la administración Reagan, John R. Thomson se especializa en el análisis de los asuntos políticos y geopolíticos de los países en desarrollo.

Tomado de: http://www.hacer.org/latam/?p=3455

Fuente: The Washington Times


samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel
samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel
samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel samuel angel

No hay comentarios.: